Los procesos de
actualización sufridos por los paradigmas tecnológicos-productivos han traído
como consecuencia la aparición de algunas organizaciones fundamentadas en su
poderío intelectual y produce, de una forma muy espontánea, gran influencia
sobre las empresas y el estilo de cómo administrar sus procesos. En este grupo
de industrias se pueden establecer todas las relaciones con el mundo de la
comunicación, como por ejemplo: la microelectrónica, la biotecnología y nuevos
materiales; así como también la industria de producción de "software"
y el transporte aéreo, conjuntamente con la robótica. Estos cambios que han
acaecidos, que en muchas ocasiones pareciera que nos están dejando atrás, han
producido nuevos modelos arquitectónicos de las organizaciones. Dichos modelos
de arquitectura organizacional tienen como características sui géneris de
estimular los procesos de adopción de "nuevas filosofías de gestión",
interpretándose como tal el estilo de hacer los procesos operativos dentro de
las organizaciones; los cuales son necesarios e indispensables dentro del
entorno competitivo de la aldea planetaria.
En los componentes
referenciales del nuevo entorno planetario, se pueden mencionar los siguientes:
el noventa por ciento de los investigadores que han vivido a través de la
historia reciente están vivos hoy día; se ha minimizado el tiempo de producción
de nuevas tecnologías, la gestión del conocimiento se duplica cada siete u ocho
años y en estos últimos tiempos el nivel de publicaciones ha sido mucho mayor
que desde los inicios de la misma humanidad. De acuerdo a estadísticas se
afirma que hoy día se publican más de dos mil documentos diarios.
Todas estas series de
cambios han traído como consecuencia que se están relegando a un segundo plano
los caminos expeditos, tales como metas y objetivos estratégicos, y en vez de
esas rutinas se está abriendo paso a un modelo en que el cambio es la rutina
principal. En consecuencia, los modelos arquitectónicos organizacionales se orientan,
sin ninguna vacilación, hacia una estructura organizacional orientada en el
capital humano.
Es necesario listar los
componentes que caracterizan las nuevas concepciones en las organizaciones que
quieren ser exitosas: 1) la adaptación inmediata al cambio técnico; 2)
Capacidad de respuesta; 3) Actualización de los estándares orientada a la
adaptabilidad y la mejora continua de los procesos; 4) Estrategia de
reconocimiento del aporte intelectual de los trabajadores (Capital Humano); 5)
Eliminación de las estructuras piramidales basadas en los niveles jerárquicos;
6) Aplicación constante de los procesos de la ingeniería recurrente y 7)
Alianzas estratégicas mundiales.
Los cambios que están
ocurriendo también han incidido en los estudiosos de las organizaciones. Ellos
han cambiado el término estructura de la organización por cuanto condiciona
mucho sus límites y en vez de ese término han implantado la frase arquitectura
de la organización tendente a la referencia de un abanico mucho más amplio de
las características estructurales de las organizaciones. Sin lugar a dudas el
significante de arquitectura conlleva a pensar no solamente en la coherencia
entre la organización como tal y sus proyecciones externas, sino también en la
armonía entre los componentes que integran el diseño. Expresado de otra forma,
la idea de arquitectura estimula una visión sistémica del propio diseño. La
palabra arquitectura también impulsa a repensar en el proceso de construir
organizaciones y no solamente diseñarlas. La realidad que se trate de una
"nueva construcción" o de una simple "renovación" depende
de un proceso dificultoso de transacciones entre los miembros de la estructura
informal de las organizaciones, que involucran a muchas personas, dependiendo del
tamaño de la organización. La noción de arquitectura permite reafirmar que el
diseño no es más que una parte del proceso. Sin lugar a dudas que la
arquitectura física aporta grandes ideas y conceptos para el diseño
organizacional, pero para aprender su filosofía, debemos profundizar más acerca
de sus principios valores. Por tal motivo se debe alternar los aspectos claves
de la arquitectura física y su influencia en el diseño de las organizaciones.
Esta nueva filosofía de
gestión, en dicho proceso de transición debe tomar en cuenta fundamentalmente
que uno de los grandes cambios dentro de esa nueva concepción es el paso de una
estructura piramidal jerárquica compartida (burocracia mecánica) a una red
coordinada de unidades (organización en red. Este proceso de transición está condicionado
por la calidad de administración de las siguientes dos variables: Complejidad
Externa y Ritmo de Cambio. Para que suceda satisfactoriamente este cambio las
organizaciones deben tener un alto ritmo de cambio y una alta complejidad
externa. Esta nueva realidad implica que la formación de profesionales debe
pasar de un estilo educacional transdisciplinario a una formación autónoma y
participativa, donde se requiere la facilitación (empowerment) de los
trabajadores a que actúen con mucha responsabilidad y autonomía por medio de
equipos de trabajo de alto desempeño.
La nueva filosofía de
gestión organizacional tiene un sistema de valores caracterizado por la
cooperación frente a la propiedad, la confianza frente al recelo, la autoridad
del conocimiento frente a la posición, y el valor de aprendizaje frente al
"aquí no se inventa nada".
0 comentarios:
Publicar un comentario